jueves, 6 de febrero de 2014

Barreras mentales

¿Cuántas veces nos ha pasado que hemos llegado muy motivados al circuito, bien sea solos o con nuestros amigos, y creemos que estamos "on fire" bajando (o subiendo, según los gustos) cuando llegamos a una trialera, o salto, y no hacemos otra cosa que echar el freno? Seguro que al que más y al que menos, desde el más experimentado, hasta el más novel, le ha pasado. No hay nada de que avergonzarse, el miedo al dolor, bien sea por caernos o porque nuestras fuerzas no nos lleguen, es un mecanismo natural de protección de nuestro cuerpo y es el encargado de tomar las decisiones encaminadas a la salvaguarda de nuestra integridad en los momentos donde a nuestro consciente no le da tiempo a procesar toda la información que le llega de los sentidos.

El mundo de la bicicleta no es solo un deporte físico, sino que, a mi juicio, es uno de los deportes en los que más influye nuestra psicología y nuestra forma de pensar. Es muy importante para este deporte aclarar muy bien las ideas que tenemos en la cabeza, que todo deje de importar y que lo único en lo que pensemos sea el momento. Hay una frase de una película de freeride que creo que, aunque lo dice en otro contexto y buscando un efecto distinto, describe esto que quiero contaros sobre las barreras mentales a la perfección. La película se llama "Life Cycles" y haciendo una traducción un tanto libre de lo que dice: "pon los pies en los pedales, mantenlos en movimiento, olvida todo excepto el momento y no habrá ningún sitio por el que no puedas montar". Como la frase dice, lo más importante de todo es centrarse en el momento, centrarse en lo que tenemos por delante y olvidarnos de todo lo demás, ¿y que quiero decir con olvidarnos de todo lo demás? No quiero decir que olvidemos donde vivimos, ni con quienes hemos salido a montar, ni nada de eso, sino que nos referimos a olvidarnos de los miedos, del miedo a caernos y del dolor de otra caída u otra lesión. Cierto es que las caídas y las lesiones son una realidad intrínseca a este deporte y por lo tanto debemos de aceptarlas, pero por este mismo motivo, también debemos de olvidarnos de ellas y pensar únicamente en que vamos a llegar abajo de la trialera, a la recepción del salto o al fondo del barranco de una pieza y sin mayores problemas. En otras palabras, debemos de visualizarnos consiguiéndolo, no hace falta recrearnos en ello, tan solo visualizar que somos capaces de lograrlo y confiar en nosotros mismos y en nuestro equipo para lograrlo. Esto último resulta realmente importante, ya que basta que nos visualicemos cayéndonos, o sencillamente pensar de que no vamos a ser capaces, para que los fantasmas del miedo acaben rondando nuestra mente y haciendo que nuestro dedo apriete la maneta del freno, y en muchas ocasiones haciéndonos caer.

No obstante, no debemos de perder el miedo, el miedo es nuestro aliado y es, junto con la técnica y la práctica, una de las principales herramientas para ir realmente rápido en la bicicleta. Esto es porque es el miedo el que nos hace actuar por instinto, sacar un pie en el momento oportuno, cambiar el balance de pesos en un rock garden o en un salto, estar alerta ante cualquier imprevisto u obstáculo que no hayamos visto. Por esa razón es muy importante controlarlo, no dejar que se apodere de nosotros y que tome el control (si el miedo tomara el control lo que suele ocurrir es que vamos a tender a ir más lentos o a pararnos, puesto que tenderemos a salvaguardar nuestra integridad física), tan solo utilizarlo en nuestro beneficio, os preguntaréis como se hace esto, ¿verdad? Sinceramente, aun busco la forma de conseguirlo jajaja Pero ya en serio, esto, en teoría, se consigue con tres pasos:

- Practicar, es decir, salir al campo, skate, calle, puerto de montaña y montar. Poniéndonos retos cada vez mayores y poco a poco irnos superando. Así iremos adquiriendo práctica y técnica, que son importantísimas para dominar nuestros miedos encima de la bicicleta.

- Confiar en nosotros mismos y en nuestro equipo. Supongo que poco hay que decir de esto, pero por si acaso... Es fundamental, como ya he apuntado antes, visualizarnos consiguiéndolo, si no confiamos en nosotros mismos, en nuestra práctica y nuestra técnica, poco vamos a poder hacer, por mucho bicicletón ultramegamásmolon de no se cuantos miles de euros... Tenemos que pensar que es posible y que vamos a hacerlo, de esta forma nuestro consciente marca como objetivo el obstáculo concreto y nuestro subconsciente trabajará en como afrontar dicho obstáculo y cuales son las maniobras a realizar. En otro caso, en el caso de que no nos visualicemos o pensemos que no lo vamos a conseguir hacer, lo que ocurre es que nuestro subconsciente es acallado por nuestro consciente, por decirlo de alguna manera (no soy psicólogo la verdad, lo explico como mejor se y se me vienen las palabras), y si lo único que piensa es en poner pie, frenar o en nosotros comiendo tierra... Por otro lado, también es importante confiar en el equipo que llevamos con nosotros, es decir, en nuestra bicicleta (importante llevar la bici adecuada a lo que vallamos a realizar, a nadie se le ocurriría subir un puerto de montaña con una dh, ni bajar la A-line de whistler con una bici de carretera), en nuestras protecciones, en nuestros compis de salida...

- Por último, pero no por ello menos importante, soltar el freno. Se que cuesta muchísimo, de hecho, yo aun no soy capaz del todo. Pero debemos de soltarlo y dejar que la bicicleta coja velocidad, dejar que nuestro cuerpo y nuestra mente reaccionen y sobretodo dejar que todo fluya, que sea el circuito el que te pida frenar y no tu porque creas que vas demasiado rápido. Es un poco complicado de explicar, de hecho, creo que os estoy liando más que otra cosa. Pero lo importante en pocas palabras es dejar que la bici corra, que nos provoque esa sensación de descontrol, pero que a la vez lo tengamos controlado, en cierta manera.

En fin, no os voy a aburrir mucho más, no tenía demasiadas ganas de dormir todavía y andaba dándole vueltas a mis bajadas del pasado sábado en Monchique, Portugal (esta tarde os pondré el vídeo resumen) y en como me acobardé en el tramo final de la wide open y como la bajé "andando", mientras mis compis bajaban sin demasiados problemas. La verdad es que me paro a pensar y me da rabia, sobretodo después de ver mis vídeos y pensar "joder, si me habría sido más fácil bajar con la bike por ahí que andando, lo único que había que hacer es dejar que la bici se coloque sola con el freno de atrás", "vaya mierda, si voy lentísimo". Nuevamente es lo que os decía, las barreras mentales, el miedo, cuando se apodera de nosotros no nos deja pensar con claridad, ni reaccionar como deberíamos, nos hace ser lentos y torpes. Debemos de superar nuestros miedos, soltar el freno y que la bici trague...

Bueno, como compensación por meteros tan tremendo ladrillo, os dejo un par de vídeos de unos tipos que seguro que si no han superado sus barreras mentales, han aprendido a controlarlas, y hacen que cada día este deporte sea más y más alucinante.



Que lo disfrutéis y happy trails para todos!!

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